Today we celebrate the 75th anniversary of the Universal Declaration of Human Rights (UDHR), the milestone human rights document that set out, for the first time, fundamental human rights to be universally protected.
It has been 75 years of building human rights norms, 75 years of fighting to advance the principles embodied by the Declaration: universality, interdependence, indivisibility, equality, freedom, and dignity.
Over the past 75 years, States have built on the rights enshrined in the UDHR and have increased their political and legal commitments under international human rights law, including through the ratification of treaties. Over the past 75 years, scholars, treaty bodies and Special Procedures mandates holders have continuously clarified and deepened these protections for all people in support of sustainable development and peace.
Civil society organizations have been crucial in disseminating and popularizing the UDHR. Human rights defenders, in particular, have been on the frontlines ensuring the advancement of the full realization of rights enshrined therein and to implementing the word and spirit of the Declaration, often in hostile environments, while frequently facing retribution and abuse for this work.
Today, the undersigned civil society organizations and human rights defenders celebrate the 75th anniversary of the UDHR and continue to stand for the universality of rights and for the simple, yet still distant principle that all people, no matter where or who they are, are entitled to the full realization of all their rights without discrimination.
Simple yet still distant. For individuals and groups facing intersectional discrimination, even the fundamental principles enshrined in the UDHR are a promise yet to be fulfilled. The rise of anti rights, anti-gender, sexist, racist, ableist, homophobic, transphobic, xenophobic, antisemitic, Islamophobic and anti-migrant movements, are threatening the progress made by feminist, women’s rights, LGBTIQ rights, and progressive social justice movements.
Grounded in the UDHR’s rights to life, health, bodily integrity, non-discrimination, education, consent to and equality in marriage, and freedom from all forms of torture and other cruel, inhuman, and degrading treatment, sexual and reproductive rights, the rights of all women & girls in all their diversity, and human rights of LGBTIQ people are being undermined and used as political pawns by reactionary currents whose aim is to maintain a patriarchal and discriminatory status quo.
We note with concern the increased presence and mobilization of anti-rights actors and organizations at the UN, co-opting human rights language to gain legitimacy and instrumentalizing the UDHR through a narrow and regressive lens to the detriment of historically and structurally marginalized groups that require the most protection from the human rights system.
Today we celebrate 75 years of the UDHR, and we reclaim this bedrock commitment to rights, equality, and justice, for all, everywhere, with no discrimination, so that the promises the Declaration holds are finally fulfilled.
We Call Upon States to stand behind this bold and inclusive vision at the UN, in regional multilateral bodies and in their own countries by aligning laws and policies to respect, protect and fulfill all human rights for all people.
Declaración Conjunta de Organizaciones de la Sociedad Civil en el 75º aniversario de la DUDH
Hoy celebramos el 75º aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, un documento histórico que estableció por primera vez que los derechos humanos deben ser protegidos universalmente.
Han sido 75 años de construcción de normas de derechos humanos, 75 años de lucha para avanzar los principios consagrados en la Declaración: universalidad, interdependencia, indivisibilidad, igualdad, libertad y dignidad.
En los últimos 75 años, los Estados han consolidado y aumentado sus compromisos políticos y legales en torno a los derechos consagrados en la Declaración Universal y en virtud del derecho internacional de los derechos humanos, incluyendo la ratificación de tratados internacionales en este ámbito. Durante los últimos 75 años, expertos/as, órganos de tratados y titulares de mandatos de Procedimientos Especiales han profundizado continuamente en el alcance de la protección prevista en la Declaración, para todas las personas, y en apoyo también de la paz y el desarrollo sostenible.
Organizaciones de la sociedad civil han tenido un rol crucial en difundir y visibilizar la Declaración Universal de Derechos Humanos. Defensores/as de derechos humanos en particular, han estado al frente de este proceso, para avanzar hacia la realización total de los derechos consagrados en la Declaración, su implementación y espíritu, a menudo enfrentando entornos hostiles, represalias y abusos por su labor.
Hoy, las organizaciones de la sociedad civil y defensores/as de derechos humanos que suscribimos, celebramos el 75º aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, al tiempo que continuamos defendiendo la universidad de los derechos a la luz de un principio simple pero aún lejano de alcanzar: que todas las personas, sin importar dónde estén o su origen, tienen derecho a la plena realización de todos sus derechos sin discriminación.
Para las personas y grupos que enfrentan discriminación interseccional, los principios más fundamentales de la Declaración Universal son todavía una promesa pendiente de cumplimiento. El auge de movimientos anti-derechos, anti-género, sexistas, racistas, capacitistas, homofóbicos, transfóbicos, xenófobos, antisemitas, islamófobos y anti-migración, son una amenaza a los avances logrados por el feminismo, los derechos de las mujeres, los derechos LGBTIQ+ y los movimientos progresistas en torno a la justicia social.
Con base en los derechos establecidos en la Declaración Universal a la vida, la salud, la integridad personal, la no discriminación, la educación, el consentimiento y la igualdad en el matrimonio, y a no sufrir de ninguna forma de tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes; están siendo socavados los derechos sexuales y reproductivos, los derechos de todas las mujeres y niñas en toda su diversidad, y los derechos humanos de las personas LGBTIQ+, y de la misma forma instrumentalizados políticamente por corrientes reaccionarias cuyo objetivo es mantener el status quo patriarcal y discriminatorio.
Observamos con preocupación el aumento en la presencia y movilización de grupos y organizaciones anti-derechos en las Naciones Unidas, cooptando lenguaje de derechos humanos para ganar legitimidad, e instrumentalizando la Declaración Universal de Derechos Humanos bajo el uso de enfoques limitados y regresivos en detrimento de grupos que han sido discriminados históricamente y que requieren la mayor protección posible del sistema universal de derechos humanos.
Hoy celebramos los 75 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos y reclamamos este compromiso fundamental con los derechos, la igualdad y la justicia, para todas las personas, en todas partes, sin discriminación, y para que las promesas que contiene la Declaración finalmente sean cumplidas.
Hacemos un llamado a los Estados a que respalden de manera decidida una verdadera visión incluyente en las Naciones Unidas, en los organismos multilaterales regionales y en sus propios países, alineando igualmente sus leyes y políticas nacionales para proteger y garantizar todos los derechos humanos de todas las personas.
Déclaration Commune des les Organisations de la Société Civile à l’occasion du 75e anniversaire de la DUDH
Aujourd’hui, nous célébrons le 75e anniversaire de la Déclaration universelle des droits de l’homme (DUDH), la pierre angulaire des droits humains qui définit, pour la première fois, les droits humains fondamentaux devant être universellement reconnus et protégés.
75 ans d’élaboration de normes en matière de droits humains, 75 ans de lutte pour faire progresser les principes incarnés par la Déclaration : universalité, interdépendance, indivisibilité, égalité, liberté et dignité.
Au cours des 75 dernières années, les États ont fait progresser les droits consacrés dans la DUDH et ont accru leurs engagements politiques et juridiques en vertu du droit international des droits de l’homme, notamment par la ratification de traités. Au cours des 75 dernières années, les universitaires, les Organes de Traités et les Procédures Spéciales ont continuellement clarifié et approfondi ces protections pour toutes les personnes en faveur du développement durable et paix.
Les organisations de la société civile ont joué un rôle crucial dans la diffusion et la vulgarisation de la DUDH. Les défenseur-e-s des droits humains, en particulier, ont été en première ligne pour assurer la pleine réalisation des droits qui y sont consacrés et à mettre en œuvre les buts et objets de la Déclaration, souvent au sein d’environnements hostiles et en étant fréquemment confrontés à des représailles et à des violations en raison de leur activisme.
Aujourd’hui, les organisations de la société civile et les défenseur-e-s des droits de l’homme soussignés célèbrent le 75e anniversaire de la DUDH et continuent à défendre l’universalité des droits et le principe simple, bien que distant dans sa réalisation, selon lequel tous les êtres humains, peu importe qui ils sont et où ils se trouvent, ont droit à la pleine réalisation de tous leurs droits sans discrimination.
Pour les individus et les groupes confrontés à une discrimination intersectionnelle, même les principes fondamentaux inscrits dans la DUDH sont une promesse qui n’a pas encore été tenue. La montée des mouvements anti-droits, anti-genre, sexistes, racistes, validistes, homophobes, transphobes, xénophobes, antisémites, islamophobes et anti-migrants menacent les progrès réalisés par les féministes, les mouvements pour les droits des femmes, les droits LGBTIQ et les mouvements progressistes pour la justice sociale.
Ancrés dans les droits inscrits dans la DUDH à la vie, à la santé, à l’intégrité physique, à la non discrimination, à l’éducation, au consentement à et l’égalité dans le mariage, et à l’absence de toutes formes de torture et autres actes cruels, inhumains et dégradants, les droits sexuels et reproductifs, les droits de toutes les femmes et filles dans toute leur diversité, et les droits humains des personnes LGBTIQ sont bafoués et utilisés comme des pions politiques par des courants réactionnaires dont l’objectif est de maintenir un statu quo patriarcal et discriminatoire.
Nous notons avec inquiétude la présence et la mobilisation accrues d’acteurs et d’organisations anti-droits à l’ONU, cooptant le langage des droits humains pour gagner en légitimité en instrumentalisant la DUDH à travers un cadre étroit et régressif au détriment des groupes historiquement et structurellement marginalisés.
Aujourd’hui, nous célébrons les 75 ans de la DUDH et nous réaffirmons cet engagement fondamental en faveur des droits, de l’égalité, et de la justice, pour tous et toutes, partout, sans discrimination, afin que les promesses de la Déclaration soient enfin réalisées.
Nous appelons les États à soutenir cette vision audacieuse et inclusive à l’ONU et dans les organismes multilatéraux régionaux, ainsi que dans leurs propres pays, en alignant les lois et les politiques pour respecter, protéger et réaliser tous les droits humains pour tous et toutes.
Declaração Conjunta da Organizações da sociedade civil por ocasião do 75º aniversário da DUDH
Hoje, comemoramos o 75º aniversário da Declaração Universal dos Direitos Humanos (DUDH), o documento marco dos direitos humanos que estabeleceu, pela primeira vez, os direitos humanos fundamentais a serem protegidos universalmente. Foram 75 anos de construção de normas de direitos humanos, 75 anos de luta para promover os princípios incorporados pela Declaração: universalidade, interdependência, indivisibilidade, igualdade, liberdade e dignidade.
Nos últimos 75 anos, os Estados basearam suas leis nos direitos consagrados na DUDH e ampliaram seus compromissos políticos e legais com a legislação internacional de direitos humanos, inclusive por meio da ratificação de tratados. Nos últimos 75 anos, acadêmicos, órgãos de tratados e detentores de mandatos de Procedimentos Especiais esclareceram e aprofundaram, sistematicamente, essas normas de proteção para todas as pessoas em apoio ao desenvolvimento sustentável e à paz.
Organizações da sociedade civil têm sido fundamentais na disseminação e popularização da DUDH. Os defensores dos direitos humanos, em particular, têm estado na linha de frente, assegurando o avanço da plena realização dos direitos consagrados na Declaração e implementando a palavra e o espírito da Declaração, muitas vezes em ambientes hostis, enfrentando frequentemente represálias e abusos por esse trabalho.
Hoje, organizações da sociedade civil e os defensores dos direitos humanos, que assinam essa carta comemoram o 75º aniversário da DUDH, continuam a defender a universalidade dos direitos e o princípio simples, mas ainda distante, de que todas as pessoas, não importa onde ou quem sejam, têm direito à plena realização de todos os seus direitos, sem discriminação.
Simples, mas ainda distante. Para indivíduos e grupos que enfrentam discriminação interseccional, até mesmo os princípios fundamentais consagrados na DUDH são uma promessa não cumprida. A ascensão de movimentos antidireitos, antigênero, sexistas, racistas, capacitistas, homofóbicos, transfóbicos, xenófobos, antissemitas, islamofóbicos e antimigrantes ameaça o progresso alcançado pelos movimentos feministas, de direitos das mulheres, de direitos LGBTIQ e que lutam pela justiça social a partir de uma perspectiva progressista.
Os direitos à vida, à saúde, à integridade física, à não discriminação, à educação, ao consentimento, ao casamento igualitário, à proteção contra todas as formas de tortura e outros tratamentos cruéis, desumanos e degradantes, aos direitos sexuais e reprodutivos, aos direitos de todas as mulheres e meninas em a sua diversidade e aos direitos humanos das pessoas LGBTIQ, que são fundamentados na DUDH, têm sido minados e usados como joguetes políticos por forças reacionárias cujo objetivo é preservar um status quo patriarcal e discriminatório.
Observamos, com preocupação, o crescimento da presença e da mobilização de atores e organizações contrárias aos direitos humanos na ONU, que cooptam a linguagem dos direitos humanos para ganhar legitimidade e instrumentalizam a DUDH a partir de uma lente de leitura é estreita e regressiva, em detrimento de grupos histórica e estruturalmente marginalizados que requerem a maior proteção do sistema de direitos humanos.
Hoje, quando celebramos os 75 anos da DUDH, reafirmamos e reivindicamos esse compromisso fundamental com os direitos, a igualdade e a justiça, para todas as pessoas, em todos os lugares, sem discriminação, de modo que as promessas contidas na Declaração sejam finalmente cumpridas.
Apelamos os Estados a apoiar essa visão ousada e inclusiva na ONU, nos órgãos multilaterais e regionais e em seus próprios países, alinhando leis e políticas para respeitar, proteger e cumprir todos os direitos humanos de todas as pessoas.